La serie comienza con una familia rota que decide mudarse a California buscando un nuevo comienzo. A partir de aquí la serie se desgrana en flashbacks que nos explican la historia personal de los actuales y antiguos inquilinos de esta peculiar mansión construida en los años 20, mientras la trama se mueve inexorablemente hacia un fantástico (aunque previsible) final
Quizá la parte más importante desde mi punto de vista es que los personajes evolucionan y son consecuentes con sus acciones, lo que evita que la serie se convierta en otro Lost. Francamente espero que no haya segunda temporada, porque sinceramente no creo que sean capaces de mantener la calidad media de la serie.
El punto débil es que la trama es en bastantes ocasiones tan previsible que los giros argumentales (e incluso parte del final) se ven venir con capítulos de antelación.